GIRI
GIRI es una palabra que tiene una difícil traducción por el gran simbolismo que conlleva. Podría traducirse como “obligación", "deber" o "lo que es correcto". Siempre va ligado a todo aquello que tiene que ver con una moral intachable. Es pues una "obligación o deber moral".
En Japón la palabra giri está íntimamente ligada al concepto de honor y también al de lealtad, virtudes básicas en un guerrero. El giri es la obligación moral de cumplir con el propio deber. Cuando alguien hace algo por tí, asumes la obligación de compensarle por ello, y esa obligación no quedará liberada hasta haberle compensado lo que hizo por tí de una manera proporcional. Cumplir con esa obligación es giri.
El maestro le está dando al alumno mucho más de lo que este quizás podrá nunca compensar; así pues, la única manera que tiene el buen alumno de pagar su deuda, de cumplir su giri, es con respeto y lealtad a su maestro, a su dojo y a su arte. Es un compromiso de por vida, siempre y cuando el maestro siga el camino del honor y la justicia.

Es una relación doble, mientras el profesor muestra a su estudiante todo lo que sabe y siente, en retribución el alumno reconoce a su sensei como su profesor guía.Esta es la manera que el karate parecía ser como un padre y su (s) hijo (s). El sensei es el padre y el estudiante el hijo (a). El padre lleva a su hijo a ser autosuficiente en karate do y cuando crece permanece con su “padre” para ayudarlo y si debe irse no pierde contacto con él y regresa siempre cuando puede. Si tienes la suerte de tener un verdadero maestro y al cabo de un tiempo razonable de práctica no lo sientes así, es mejor que no continúes, pues está claro que no has sido capaz de comprender la senda marcial.